Así dice Maná en una de sus canciones, que creo vendría siendo la única que me gusta de ellos.
Llueve sobre Santiago en forma Valdiviana, y después de un par de semanas he decidido volver a escribir, quizás deje pasar un tiempo mas.
Lo que pasa es que bloggisticamente hablando se han robado la llave de "mi casa", hace unas semanas unos virus ladrones entraron y además de hacerme pasar un susto, me robaron mi entrada al control de casa. Entonces la sensación no me gusta, todos pueden venir a verme, pero yo no lo puedo saber y como eso no me gusta, ya se me han quitado las ganas de escribir.
Es injusto, y lo peor es que siguen pasando los días y aun no tengo la solución, quizás hasta que venga Panchito, que espero sea pronto, porque esto de que mi computador se transforme en el triángulo de la Bermudas me tienes apestada.
Siento que ha pasado un siglo desde la última vez que escribí.
Si hubiera sido una deschavetada seguro estaría de vuelta de SF y tal vez hubiera gritado "Yo!!!!" o tal vez solo me hubiera despedido en buena forma.
Pero como son cosas que no pasaron mejor ni pensarlas. Lo malo es que eso me impulso a asumir ciertas otras cosas, pero tal cual como esa vez que decidí que era mejor solo quedarse en Gainesville y no partir a SF, y ahora piense que puede haber sido de "esos" graves errores de la vida (…), para que "no pasara denuevo" decidí apostar un poquito mas, pero obvio, craso error.
Supongo que es como en los casinos, a uno le empieza a ir bien cuando esta jugando y si uno no sabe parar, pierde todo. Debería haberle hecho caso mas a mi "instinto casinistico", en esos lugares soy bastante mas controlada.
Así es que nada..., heme aquí again.
Definitivamente hay momentos en que mi ocultísimo lado loco se activa por circunstancias ídem, aun pienso que ¡hasta me había conseguido el vestido! Quizás algún día averigüe si algo fue verdad, por ahora creo que ser conservadoramente centrada es lo único que me queda. No más prueba y error.
El siempre asertivo Bernie Taupin tiene razon... sorry seems to be the hardest word.
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